No hay justicia para el feminicidio de Lupita; restan 24 días para el cierre de investigación
A tres meses y 20 días del homicidio de Verónica Guadalupe Benítez Vega, en la comunidad de San José el Vidrio, Nicolás Romero, no existe ningún avance en la investigación para definir al culpable de su muerte, revelaron familiares de la joven estudiante.
El caso ocurrido el pasado 6 de julio, en el departamento donde vivía Lupita con su exesposo Luis Ángel y sus suegros, parece apuntar hacia una muerte por golpes y puñalada, además de hallar como únicos sospechosos al exmarido y su familia.
La Fiscalía de Justicia del Estado de México (FGJEM) no ha definido si hay un culpable, advirtió Juana Isabel Benítez, hermana mayor de Verónica, al ofrecer una conferencia de prensa frente a las instalaciones de la dependencia estatal.
“Es la fecha en que no llaman a declarar a la suegra, ni al papá (de Luis Ángel), una maestra y el hermano. No han declarado y existen conductas delincuenciales, circunstanciales o de reproche que no han sido investigadas”, acusó Juana Isabel en sus explicaciones sobre la forma en que se lleva la investigación.
Jesús Benítez, padre de Lupita, no haya aún una explicación lógica, ni razón por la que la Fiscalía no ha extendido la investigación en contra de la familia de Luis Ángel, al considerar que son testigos clave del homicidio y se requiere que se les aplique la prueba del polígrafo.
“Se me hace ilógico que no se den cuenta hasta el momento de que ellos son los responsables de la muerte de mi hija y que estén aportando pruebas para deslindar al exposo de mi hija”, aseveró José.
Una de las pruebas claves en el asesinato de Guadalupe que maneja la Fiscalía, es que el cabello que se encontró en sus uñas el día de los hechos y que determinó que era de ella y no del agresor. Sin embargo José y su hija Juana desde el principio han estado en desacuerdo con dicha resolución, por lo que han hecho la solicitud por escrito al juez para realizar la exhumación del cuerpo de la joven y poder aplicar nuevamente una prueba genética.
“Solicitamos que se haga nuevamente una prueba genética en el cuerpo de mi hermana, porque no estamos convencidos de los resultados”, argumentó la hermana de la víctima.
Según los tiempos y fechas que otorgó el Juez de Control con sede en Tlalnepantla para el cierre de investigación, será el próximo 9 de noviembre, cuando se pueda dar un veredicto sobre la culpabilidad de José Ángel “N”.
Hasta el momento, la familia Benítez Vega, han aportado dos testigos a su favor, de dos personas que el día 6 de julio observaron el momento en que el exesposo y suegros de Lupita, la golpeaban, pero aún así no se han aceptado como absolutas y ciertas.
El 6 de enero de 2017, la familia Benítez Vega decidieron casar a su hija Verónica Guadalupe con su novio de hace cuatro años, Luis Ángel, obligados por el embarazo avanzado que presentaba la joven.
Para ese entonces Lupita con tan sólo 21 años de edad, estaba el sexto semestre de la Licenciatura Bioquímica Diagnóstica en la UNAM, los cuales tuvo que abandonar para esperar el nacimiento de su primer hijo.
José reveló que en los cuatro años de noviazgo nunca se percataron de alguna conducta agresiva del novio de su hija, fue hasta el paso de los meses, después del matrimonio, cuando descubrieron los primeros síntomas. Pero todo quedó en el anonimato y sospechas.
“En alguna ocasión mi hija Juana, le descubrió en sus cuerpo moretones y golpes cuando mi hija se bañana en la regadera de la casa, pero le pidió que no dijera nada”, recuerda José.
Según los testimonios del padre y la hermana de Lupita, el día de los hechos, la joven madre, habría sido apuñalada en 17 ocasiones y rematada con un bloc sobre la cabeza para quitarle la vida. Sin embargo, las causas de su muerte, aún está en tela de juicio.