Confía Meade en apoyo mexiquense

José Antonio Meade, antes como funcionario y ahora como candidato presidencial, tiene buen ánimo; los últimos meses han sido intensos, pero su actitud no cambia, es amable, sonriente y atento.

Este fin de semana fue a un territorio donde el PRI tiene presencia: el Estado de México, y mientras la plaza de Tecámac se llenaba de simpatizantes, el candidato de la coalición Todos por México sostuvo una breve charla con CAPITALMEDIA sobre sus actividades rumbo a la Presidencia.

“El Estado de México implica prácticamente uno de cada siete pesos que el país genera, es uno de cada siete mexicanos que aquí vivimos, implica orgullo, fortaleza y la posibilidad de recibir con generosidad a muchos que vienen aquí a encontrar un mejor destino”.

Considera que va remontando en las encuestas, advierte el riesgo de equivocarse con una propuesta que echaría atrás lo avanzado y cuestiona que quienes quieren gobernar se resistan a transparentar sus bienes de cara a la sociedad y que tampoco desean apostar por una declaración que da más garantías como la 7de7 que él entregó.

Ha pasado una semana de su arranque de campaña que lo llevó al sur, norte y centro del país en sólo siete días. Llega a la cita con un atuendo informal, con jeans y una camisa blanca; saluda a los presentes, se acomoda en el sillón y se muestra aliviado por poder presentar a la ciudadanía sus propuestas de gobierno, asegura que el saldo de esta primera semana ha sido bueno.

“Fue una muy buena primera semana, finalmente, ya en la posibilidad de hablar de propuestas, de temas concretos de rumbo para el país, veo una campaña con alegría y esperanza, ahora especialmente centrada en la unidad y orientada a que vayamos construyendo cómo avanzar como país y cómo avanzar familia por familia”, esto último en referencia a su programa bandera Avanzar Contigo que plantea el apoyo personalizado para que la gente concrete sus proyectos, ya sea a través de becas, créditos u otro tipo de ayuda.

Mientras afuera se escucha la algarabía del mitin convocado en el pueblo de Tecámac, Meade continúa con su análisis de los resultados de la primera semana de proselitismo: “Ha permeado, va bien, es una campaña que tiene literalmente una semana y en esta semana hemos hecho bases importantes, se percibe alegría y optimismo somos un proyecto que creció en la campaña e intercampaña, empezamos de cero y estamos seguros que vamos a ganar”, con la confianza de que su propuesta es la mejor.

“No nos vayamos a equivocar”, ha sido un mensaje reiterado en sus spots y mensajes a la ciudadanía, y en esta entrevista lo reitera: “Creo que como nunca en la historia del país hay dos propuestas muy diferentes y hay una que le da al país rumbo, certeza, unidad, confianza, una propuesta que puede traer consigo inversión, empleo, que recuperemos seguridad, que saquemos la corrupción de la política, que vayamos enfrentando de manera más decidida la frustración de la pobreza, y hay otra alternativa que implica cancelar proyectos de inversión, poner en riesgo la seguridad, sacar criminales de la cárcel… sí, de verdad, no nos vayamos a equivocar”.

Meade considera que la propuesta del candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador, es igual que hace seis y 12 años, que cancela el futuro del país y lo pone en riesgo de perder la confianza para invertir y generar empleo.

“Por eso el empeño que estamos poniendo en hacer propuestas, en hacer contraste, en presentar la 7de7, que se me conozca por un perfil honesto y por mis ganas de trabajar por México, que juntos vayamos dándole un buen rumbo al país, un destino de unidad, no uno de división o confrontación”.

Pero los dichos del candidato no se quedan ahí, ejemplifica la visión del político tabasqueño que no empata con lo que se ha logrado. Recuerda el polémico tema del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad México que López Obrador pretende echar abajo, lo que representa ese proyecto, refiere Meade, son “450 mil empleos, la posibilidad de darle respiro y modernidad a la capital, conectividad al país, con un proyecto moderno bien pensado y hecho, que con ingeniería y talento mexicano rescata y resuelve problemas complicados y que nos permite ver al futuro con optimismo”.

Continúa con las visiones distintas de país. “En seguridad que tanto nos preocupa, hay una propuesta de que la seguridad descanse en prevención, que no lleguen armas, mejorar y fortalecer las policías, poner de acuerdo a la Federación y los estados; contra una propuesta que implica perdonar a los criminales y regresarlos a las comunidades donde hicieron daño”.

Un tema más que preocupa al candidato es lo alcanzado con la reforma educativa, que podría estar en riesgo: “Se apuesta por las niñas y los niños, dándoles el mejor apoyo a los maestros, para que les den a los alumnos lo mejor de sí y con ese aprendizaje tengan muy buenas herramientas; contra otra propuesta de aliarse con quienes siempre han hecho de la educación de los niños rehén en un proceso político”.

Finalmente, expresó su inquietud de que los candidatos “le saquen” y no se interesen por avanzar en transparencia, sobre todo cuando se trata de su patrimonio.

Meade asume una actitud seria, pues considera esta negativa de Ricardo Anaya y López Obrador como una agresión, pero a la gente que quieren gobernar.

“No es un llamado mío, es de la ciudadanía, para que quien quiera liderar el país acredite que ha tenido una vida honesta, en un país donde hay profundo coraje por la corrupción; el que no brinque frente a la oportunidad de acreditar que lo es, algo tiene que esconder y debería preocuparnos también”.

Recordó las incongruencias que se han ventilado en cuanto al patrimonio de sus adversarios. “Si digo que no tengo nada y resulta que tengo departamentos, pues a mí me da la impresión de que una ciudadanía preocupada por un gobierno honesto debiera de interesarle. Si digo lo que tengo en la 3de3, pero desde el gobierno hice negocios para hacerme de una planta industrial, la ciudadanía que quiere un gobierno honesto tendría que quererlo saber”.

Afuera del salón donde se llevó a cabo la entrevista aumenta el sonido de las porras, batucadas y la música, sólo esperan al candidato, pero antes de irse se le pregunta qué sigue para las próximas semanas y sin hacer una pausa a la reflexión responde: “Ganar el 1 de julio, pedir el apoyo y la confianza, seguir caminado con propuestas, unidad, entusiasmo y claridad de que ganaremos la elección y vamos a ser un buen gobierno”.